¿De dónde viene la obra? ¿Qué azar, qué ínfimo episodio dará comienzo a la cadena de la creación? (...) No escribiré más sobre iluminaciones porque son muy misteriosas y porque yo no las entiendo más de lo que puedan entenderlas mis lectores. Me fascinan, eso es todo.

domingo, 11 de agosto de 2013

Querida Carson McCullers: 
A qué llamamos vacío. Al espacio, pero el espacio está lleno de cosas. Lo bueno de ser una escritora de SCIFI es que te preguntas de cuántas formas podría matarnos la belleza. No estamos hechos para vivir fuera de nuestro planeta. Pero queremos hacerlo. Podríamos hacerlo. No hacerlo sería estúpido. Como el gato que ve un ovillo y vuelve la cara y sueña con el ovillo, y tarde o temprano volverá a él. 

lunes, 15 de abril de 2013

Una niña sola en la hierba


¿Qué es una obra que inspira a otra? Tal vez como una semilla que engendra otra semilla más impura, pero es esa impureza la que me resulta interesante. Transformar la soledad que inquieta en otra soledad más ingenua, en ese camino prácticamente sin contaminar que es la primera infancia. La hierba es la hierba para todos. Wyeth, en su mítica pintura sobre Cristina, quiso retratar la enfermedad y el coraje. Donshosho, cuyo nombre ni siquiera será su nombre, retrata otra cosa. Quizá ese emblema de todas las culturas, de todos los estados de ánimo, que es la niña sola. Vemos a una niña sola y no sabemos qué sentimos. Pero ella. Como si no necesitara nuestra ayuda. Imagínate de veras, querida Carson, que no la necesitara. Que hubiese triunfado la magia sobre la vulgaridad de la evidencia. Que no importara hacia dónde se dirige, sino sólo la simple verdad de que, para bien o para mal, está ahí. 

martes, 29 de enero de 2013


JOVEN CON MIEDO MURMURA



Ya vienen los aleutianos:
mi pobre corazón está preñado
de miedo.

Vienen en grandes barcas recortadas
entre el hielo.

Vienen con su codicia y su lujuria.

Ya vienen los aleutianos:
mi pobre corazón está preñado
de espanto.

Llora mi pueblo ante el viento del norte
que nos trae su hedor.
Los aleutianos
esposos de la tierra sin hogares
vienen tristes, vienen
porque están solos
y añoran el follaje y el verdor
de nuestros valles.

Pero traen también cuchillos y con ellos nos convencen
para que hagamos cosas
que no queremos.

Traen también monedas. Su dinero
es sucio
y está manchado de sangre lejana.

Ya vienen, vienen y tengo miedo
y aún así sabré
ser valiente cuando llegue el momento
y vea sus mástiles
helados atracando en la playa.

De El polizón desnudo (El Gaviero Ediciones, 2009)